Hot!

El vestido más caro del mundo

Un coleccionista anónimo pagó 4,6 millones de dólares por la histórica prenda que Marilyn Monroe lució En “La comezón del séptimo año”.






Apenas 50 dólares fue lo que recibió por haber posado desnuda sobre un paño rojo. Tenía tan sólo 20 años y eso fue lo que le ofrecieron en una agencia de Nueva York. Ella aceptó. Por entonces, Marilyn Monroe no podría haber imaginado que 65 años después, en 2011, un coleccionista pagaría 4,6 millones de dólares por un vestido. No cualquier vestido: el blanco que la convirtió en la mujer más sexy de la historia del cine.

El sábado, ese hombre que prefiere guardar su identidad adquirió la prenda que la blonda lució en el mítico filme La comezón del séptimo año , de 1955. Fue en la subasta que hizo que, a su pesar, la estrella de Cantando bajo la lluvia , Debbie Reynolds, tuviera que desprenderse de un legado de oro que había acumulado a lo largo de décadas: una colección de artículos relacionados con la industria cinematográfica que contenía 3.500 vestidos, 20.000 fotografías originales y cientos de pósters de filmes.
Seis décadas dejaron huellas. Y no sólo en la pantalla grande, sino también en la tela del etéreo vestido que Marilyn sostenía, entre ingenua y feliz, cuando el subte pasaba por debajo de las alcantarillas. Ahora el lienzo que diseñó el estadounidense William Travilla tomó el color del tiempo: el blanco devino un suave ámbar.

La primera de las subastas de la colección de Debbie Reynolds alcanzó 22,8 millones de dólares. La extravagante cifra, a la altura de la también extravagante Marilyn, sorprendió incluso a los organizadores de la casa de remates Profiles in History, ubicada en Beverly Hills. En un principio, se creía que la prenda podía alcanzar los 2 millones de dólares. Pero no. Y, como si eso no fuera suficiente, el vestido rojo de lentejuelas que Monroe llevó en Los caballeros las prefieren rubias se vendió por 1,8 millones de dólares.
Desde cifras mínimas por fotografiar la piel de la diva, a números desorbitantes por conservar su ropa, de todo ha pasado con Monroe. Hubo quienes abonaron por contemplar su interior y no precisamente el metafísico: 45 mil dólares se pagó por dos radiografías suyas hace ya un año.

0 coment�rios:

Publicar un comentario