La actriz ganadora de un Oscar se encuentra en Richmond, al suroeste de Londres, mientras su marido Brad Pitt se encuentra grabando la película "Guerra mundial Z".
Por ello, la actriz decidió llevar este martes a sus seis hijos a la cafetería Pottery Cafe, donde todos pudieron decorar su propia vajilla.
El café cuenta con una decoración de "Pirates and Princesses" (Piratas y Princesas) "“ coincidiendo con las vacaciones de verano de las escuelas británicas "“ y los gemelos Knox y Vivienne, de tres años, se animaron a disfrazarse de pirata y princesa respectivamente.
"¡Pasaron una encantadora tarde pintando y esperamos verlos de nuevo pronto!", contó uno de los presentes a la página web MailOnline.
Mientras su familia disfrutaba de un día en Richmond, Brad sorprendió a una panadería local de Cornualles, al suroeste de Inglaterra, al encargar 700 empanadas de Cornualles.
El guapo actor se encuentra grabando en la ciudad balnearia de Falmouth y quiso regalarles algo a los actores y al equipo de rodaje, así que solicitó el encargo masivo en la panadería Rowe de Cornualles.
"Sabía que Brad Pitt estaba grabando una película en la zona, pero lo primero que pensé fue: "Tiene que ser una broma"", contó al diario Daily Express el jefe de marketing, Paul Pearce.
Por ello, la actriz decidió llevar este martes a sus seis hijos a la cafetería Pottery Cafe, donde todos pudieron decorar su propia vajilla.
El café cuenta con una decoración de "Pirates and Princesses" (Piratas y Princesas) "“ coincidiendo con las vacaciones de verano de las escuelas británicas "“ y los gemelos Knox y Vivienne, de tres años, se animaron a disfrazarse de pirata y princesa respectivamente.
"¡Pasaron una encantadora tarde pintando y esperamos verlos de nuevo pronto!", contó uno de los presentes a la página web MailOnline.
Mientras su familia disfrutaba de un día en Richmond, Brad sorprendió a una panadería local de Cornualles, al suroeste de Inglaterra, al encargar 700 empanadas de Cornualles.
El guapo actor se encuentra grabando en la ciudad balnearia de Falmouth y quiso regalarles algo a los actores y al equipo de rodaje, así que solicitó el encargo masivo en la panadería Rowe de Cornualles.
"Sabía que Brad Pitt estaba grabando una película en la zona, pero lo primero que pensé fue: "Tiene que ser una broma"", contó al diario Daily Express el jefe de marketing, Paul Pearce.
"Pero mientras la conversación seguía adelante me di cuenta de que el encargo era de verdad y nos pusimos a ello. ¡Fue una locura!"
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