Marino Martínez al desnudo

El actor dio detalles de su vínculo con su compañero en “Los Únicos” y ahondó sobre la decisión de no hacer teatro y cómo fue la charla con Adrián Suar.

                       

Por primera, vez Mariano Martínez se refirió a su decisión de no participar en la versión teatral de la exitosa tira “Los Únicos”. “Prioricé mi familia. Estar con mi hija fue la razón fundamental de haber tomado semejante decisión. Sé que Adrián (Suar) se enojó, pero lo hablamos y me entendió. Por otra parte, si la obra no se hubiera podido hacer sin mí, mi determinación hubiera sido otra”, contó, para luego desestimar la posibilidad de una mala reacción de parte de sus compañeros.“No tienen por qué enojarse. La realidad es que nos comprometimos a participar en un programa de televisión, y eso lo cumplo a rajatabla, después lo otro es un negocio extra. También es cierto que ninguno de mis compañeros es padre, entonces quizá les cueste entender del todo mi decisión”, concluyó.
Fascinado con la paternidad, Mariano Martínez dijo, emocionado  en una nota para una prestigiosa revista que  : “Olivia es lo más grande que me pasó en la vida, es increíble lo que siento por mi hija. A veces de tanto amor me asusto y digo: ¿Hasta dónde va a llegar esto? Es maravilloso ser padre. Es un sentimiento que me invade desde la uña del dedo gordo del pie hasta la punta del pelo. Me parte la cabeza”, a la par que admitió fantasear con la idea del casamiento y con seguir agrandando la familia.Respecto de la boda de su colega Nicolás Cabré, a la que él no fue invitado, comentó: “Con ‘Nico’ Cabré nos llevamos bien laburando, pero fuera del trabajo no somos amigos. ¿Por qué motivo me iba a invitar? Muy pocas veces se genera un vínculo de amistad como me sucedió con Luciano Castro y Gonzalo Heredia” (protagonistas de Valientes).Por último, dejó una primicia al anticipar que en breve concretará el sueño de convertirse en productor. “Será un unitario, lo voy protagonizar yo, el elenco ya lo tengo pensado, pero no puedo adelantar demasiado. Pensá que estoy desde hace dos años trabajando y esperando que este gran sueño se concrete, pero tengo que reconocer que producir es remar en dulce de leche”, dijo para luego rematar: “La verdad, fue muy positivo el cambio de vías que experimenté a partir del nacimiento de mi nena. Logré tranquilizarme, concentrarme en mi familia y en mi persona y, encima, triunfar en el ámbito laboral. Estoy atravesando un momento de plenitud”, expresó con grata alegría.