La hospitalización de Demi Moore hizo que todo su entorno pensara lo peor.
El abuso de gas de la risa (óxido nitroso) hizo que la actriz tuviera que ser atendida por el servicio de emergencias. Tras las especulaciones sobre su estado de salud, los amigos deDemi Moore han roto su silencio.
La revista 'Us Weekly cuenta que la actriz está sumida en una profunda depresión desde su ruptura con Ashton Kutcher. Los amigos de la actriz han hablado para esta publicación y han asegurado que cuando hospitalizaron a Demi "todo el mundo pensaba que iba a morir".
La actriz ha intentado salir adelante desde su divorcio, pero parece que no ha conseguido fingir sus sentimientos ante sus amigos: "ella se encontraba mal, y quería rodearse de gente joven para sentirse mejor". El entorno de Demi Moore ha asegurado a Us Weekly que su cansancio se debía a que no dormía ni comía.
El día que Demi Moore fue hospitalizada hizo que la actriz se diera cuenta del estado en el que se encontraba. La relación con sus allegados se había enfriado tanto desde su divorcio que no hablaba con nadie sobre sus sentimientos.
Los amigos de la actriz han roto su silencio y declaran que: "Demi ha tenido demasiado orgullo para aclarar sus problemas. Ella no iba a permitir que la gente supiera nada ni hablara con ella acerca de sus problemas". Todo apunta a que Demi Moore no consigue salir del hoyo.
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