Esteban Solveyrea, el personaje que interpretá por Rodrigo De La Serna el nuevo unitario de Pol-ka.
¿Quién es Esteban Solveyra? (Rodrigo de la Serna) Paciente de la terapia grupal en la Fundación Renacer. Es un hombre muy temperamental: suele tener fricciones con sus compañeros de grupo así como con sus terapeutas. Siempre provocando, siempre desestabilizando al otro. Su patología es compleja y hasta desconcertante: es un psicópata mitómano. Miente compulsivamente y con tanta vehemencia que es muy difícil identificar qué elementos de su relato son ciertos y cuáles obra de su inventiva. Lo que uno cree saber de él puede no ser cierto.
El equipo de terapeutas, sus compañeros de sesión e incluso su madre irán descubriendo que muchas de las verdades sobre la vida de Esteban no son más que sólidas mentiras que él sostiene con una frialdad escalofriante. Hay, además, en su pasado un episodio perturbador y traumático que lo persigue como una pesadilla recurrente. Un evento que lo une a su madre de una manera trágica. La entrada de Julieta (Paola Krum) a la Fundación hará aflorar en él un sentimiento amoroso como el que quizás nunca sintió por alguna mujer.
SINOPSIS “TIEMPOS COMPULSIVOS”
Escenario: Fundación Renacer. Un espacio terapéutico que alberga pacientes ambulatorios con compulsiones severas, algunas asociadas a patologías del entorno psiquiátrico. El experimentado Dr. Ricardo Buso (Fernán Mirás) tendrá a su cargo a un grupo de personas con padecimientos de diversa índole: Gerado (Guillermo Arengo) “work-aholic”, adicto al trabajo y a la conectividad constante; Inés (Peterson) con una compulsión a la acumulación, obsesiva del orden y con trastornos alimenticios; Sofía (Pilar Gamboa) con su cuerpo plagado de heridas y cicatrices que ella misma se infringe para opacar dolores más profundos; Teresa (Gloria Carrá) y sus múltiples personalidades, siempre pujando por prevalecer una sobre la otra; y Esteban (Rodrigo De La Serna) quizá el caso más complejo: un psicópata mitómano pero con una lucidez arrasadora. En encuentros grupales diarios, Ricardo intentará aliviar el malestar que aqueja a sus pacientes, junto a su fiel colega y amigo Ezequiel (Juan Minujín) y una nueva doctora que se suma a este trabajo multidisciplinario: la psicóloga Julieta Despeyroux (Paola Krum) Este equipo de profesionales los hará enfrentar a sus miedos, sus angustias y deseos, siendo el eje de sus propios dramas y, a veces, el reflejo o la multiplicación de los traumas del otro. En algunos momentos, los terapeutas los observarán a través del cristal espejado de la Cámara Gesell, sin que esto signifique que de un lado estén los sanos y del otro los enfermos: los médicos también sufren y deberán luchar contra sus “propios fantasmas”, similares a los que alteran el bienestar de sus pacientes. En el alma de todos anidan distintas compulsiones. Y los tiempos que corren las hacen germinar.
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