El intérprete británico sigue digiriendo una fama repentina que comenzó con el éxito de la primera entrega de la saga “Crepúsculo”, en 2008.
Sin embargo, el actor cree que no es nada fácil, ya que el estrellato puede volver loco a quien no está preparado para asumirlo.
“¡Quizá no tenía mucha sensatez ni cuando empecé! Lo cierto es que sí siento que he perdido un poco mi centro. He visto a muchas personas asumir la fama en un proceso en el que se han vuelto locos, por lo que de verdad asusta”, admitió Robert.
Al proceso de convertirse en estrella internacional de la noche a la mañana, Robert ha sumado un duro problema personal: la infidelidad de su pareja, Kristen Stewart, que este verano le sorprendió tanto a él como a todos los fans de la saga, quienes habían disfrutado al ver cómo la historia de amor de sus protagonistas, Bella y Edward, se hacía realidad. Sin embargo, la conexión entre los actores es tan profunda, que Robert decidió darle una nueva oportunidad y en las últimas semanas su relación ya habría vuelto al punto en el que estaba.
“Empezó a pensar que nadie en el mundo volvería a entender su vida. Su parte más racional le dijo que no debía echar por la borda una relación de tres años por una infidelidad. Rob valoró sus opciones y se dio cuenta de que no sabría ni por dónde empezar si él y Kristen rompían. Tienen una conexión muy profunda y además son jóvenes. Todas las relaciones tienen sus momentos dramáticos”, contó una fuente.
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