El actor desea que la novela lidere el rating y revela que compartiría pantalla con Tinelli, mientras que la actriz celebra el cuidado de Underground y cuenta que a veces lleva a su pequeño hijo al set.
Este lunes, a las 21.30, finalmente Telefe presentará Vecinos en guerra, la apuesta más importante del año, que llega para reemplazar el éxito Graduados y reforzar un prime time que en estos momentos saborean Adrián Suar y El Trece. La receta: misma productora (Underground), mismo horario y mismo género de comedia costumbrista con personajes que ocultan un pasado que irá saliendo a la luz a lo largo de los 120 capítulos. El condimento especial de la receta –que el año pasado destronó a Tinelli– lo impone Diego Torres, que vuelve a protagonizar una tira diaria después de veinte años, acompañado por un elenco coral: Eleonora Wexler, Mike Amigorena, Mónica Antonópulos, Carola Reyna, Mirtha Busnelli, Hugo Arana, Carlos Portaluppi, Marcela Kloosterboer, Mario Pasik, Chang Sung Kim y Gastón Soffritti, entre otros. PERFIL entrevistó a Amigorena y Antonópulos, quienes serán marido y mujer en la ficción creada por Sebastián Ortega y Pablo Culell.
—¿Están ansiosos o tranquilos?
AMIGORENA: Hay una cuota de ansiedad de querer que el público la conozca, se enganche y no se despegue de la tira. Mentiría si digo que no me interesa el rating, quiero que haga la mayor cantidad de puntos y que lidere; si no sucede, y bueno… la televisión es un casino.
—Es la primera vez que trabajás con Underground. ¿Cómo te sentís en la productora?
ANTONOPULOS: Desde el momento en que me llamaron siempre hubo una muy buena atención, mucho cuidado, se fijan en todo: locaciones, guiones, actores, autores, las buenas personas que eligen más allá de los actores. Es un placer trabajar acá, donde me siento cómoda, como me pasó con El elegido, realmente disfruto venir a grabar y es un gran privilegio que no a todos los actores les pasa.
—¿Hablan con Ortega?
ANTONOPULOS: Nos acompañó los primeros días, supervisando, ocupándose de la caracterización de los personajes, mirando las escenas, y como un gran padre te va dando libertad cuando se va encontrando uno con el personaje y el camino, aunque uno nunca siente encontrarlo por la famosa inseguridad del actor.
—Volvés a una tira después de “Los exitosos Pells” (2009), incluso rechazaste estar en “Graduados”. ¿Por qué esta vez le dijiste que sí a Ortega?
AMIGORENA: Sentí que tenía que estar en la televisión, divertir y divertirme; de hecho, mi personaje, Alex, es muy desopilante.
—Estuviste a punto de estar en “Solamente vos” pero desististe. Ahora vas a competir. ¿Pudiste hablar con Suar?
AMIGORENA: No. En ese momento tenía ganas de dedicarme de lleno a la música, a mi banda. Pasó el tiempo, ya Adrián tenía el elenco, y me dije: “Voy a pasar a saludar a Sebastián por la nueva oficina”, en Palermo. Hablando de la vida, me comentó el proyecto y me preguntó si me interesaba. Fue todo muy casual. Recuerdo que yo estaba de bermudas y ojotas, y me fui con esa historia en la mente.
—¿Creés que a Suar pudo haberle molestado?
AMIGORENA: No. Uno pasa por esas situaciones a diario, uno elige todo el tiempo y no tiene que ver con la traición. La traición es diferente. Es pensar en ir para otro lado para tener un mejor desempeño o camino. Entiendo a la gente que pueda pensar lo contrario. No hay motivo para pensar que lo cagué. De hecho me conoce así, soy una persona bastante sincera y realmente tengo que poner el corazón donde estoy, si no, no lo puedo hacer.
—¿Cómo se llevan con Diego Torres?
ANTONOPULOS: Muy bien. Con Diego no tengo muchas escenas, pero en las que son grupales es increíble, carismático, lo veo cómodo en su regreso a la actuación, es placentero y me encanta la pareja que hace con Eleonora.
AMIGORENA: Impecable, es una grata sorpresa haberlo conocido, aprendés de él en silencio, que es lo más importante, no cuando te lo dicen. Es un artista, figura internacional, muy profesional, rol de padre en la ficción y en la vida real. Un tipo que no para de irradiar música.
—Comparten el amor a la música. ¿No hubo zapada en los camarines?
AMIGORENA: No, todavía no. Hay un respeto. Ojo: yo canto y él es cantante (se ríe).
—¿Es líder o perfil bajo?
ANTONOPULOS: Es uno más, está disponible, es un elenco donde todos estamos conformes con el personaje. Es un proyecto generoso. A veces los proyectos no lo permiten. Uno disfruta más cuando ve que todos los compañeros pueden disfrutarse y mostrarse. En la presentación del martes vimos en el tráiler que todos estaban felices. Y eso hace que nadie mire el laburo del otro.
—¿Te pasó, como en la tira, de reencontrarte con algún amor del pasado?
AMIGORENA: Sí, me pasó después de diez años sin vernos. En general he vuelto por una cuestión de piel, por lo que fueron encuentros fogosos sabiendo que no podíamos estar juntos en pareja, sólo disfrutábamos del momento íntimo, diferente a mi personaje, que nunca deja de querer al personaje de Eleonora.
—¿Vas a tener escenas jugadas como en “El elegido”?
ANTONOPULOS: No. Es distinto el personaje, acá es una actriz, vulnerable, insegura y frágil, y además el género es una comedia. El anterior estaba vinculado por la oscuridad de un pecado capital y el extra de su sexualidad con otra mujer. Leer los libros es un placer, no cambiás ni una coma y los personajes son todos bien distintos.
—¿Compartirían pantalla con Tinelli?
AMIGORENA: ¡Cómo no! No tendría problema, pero es una decisión del canal que no me incumbe. El canal va a hacer lo mejor para su producto. Si Marcelo está, habrá que compartir.
AMIGORENA: Hay una cuota de ansiedad de querer que el público la conozca, se enganche y no se despegue de la tira. Mentiría si digo que no me interesa el rating, quiero que haga la mayor cantidad de puntos y que lidere; si no sucede, y bueno… la televisión es un casino.
—Es la primera vez que trabajás con Underground. ¿Cómo te sentís en la productora?
ANTONOPULOS: Desde el momento en que me llamaron siempre hubo una muy buena atención, mucho cuidado, se fijan en todo: locaciones, guiones, actores, autores, las buenas personas que eligen más allá de los actores. Es un placer trabajar acá, donde me siento cómoda, como me pasó con El elegido, realmente disfruto venir a grabar y es un gran privilegio que no a todos los actores les pasa.
—¿Hablan con Ortega?
ANTONOPULOS: Nos acompañó los primeros días, supervisando, ocupándose de la caracterización de los personajes, mirando las escenas, y como un gran padre te va dando libertad cuando se va encontrando uno con el personaje y el camino, aunque uno nunca siente encontrarlo por la famosa inseguridad del actor.
—Volvés a una tira después de “Los exitosos Pells” (2009), incluso rechazaste estar en “Graduados”. ¿Por qué esta vez le dijiste que sí a Ortega?
AMIGORENA: Sentí que tenía que estar en la televisión, divertir y divertirme; de hecho, mi personaje, Alex, es muy desopilante.
—Estuviste a punto de estar en “Solamente vos” pero desististe. Ahora vas a competir. ¿Pudiste hablar con Suar?
AMIGORENA: No. En ese momento tenía ganas de dedicarme de lleno a la música, a mi banda. Pasó el tiempo, ya Adrián tenía el elenco, y me dije: “Voy a pasar a saludar a Sebastián por la nueva oficina”, en Palermo. Hablando de la vida, me comentó el proyecto y me preguntó si me interesaba. Fue todo muy casual. Recuerdo que yo estaba de bermudas y ojotas, y me fui con esa historia en la mente.
—¿Creés que a Suar pudo haberle molestado?
AMIGORENA: No. Uno pasa por esas situaciones a diario, uno elige todo el tiempo y no tiene que ver con la traición. La traición es diferente. Es pensar en ir para otro lado para tener un mejor desempeño o camino. Entiendo a la gente que pueda pensar lo contrario. No hay motivo para pensar que lo cagué. De hecho me conoce así, soy una persona bastante sincera y realmente tengo que poner el corazón donde estoy, si no, no lo puedo hacer.
—¿Cómo se llevan con Diego Torres?
ANTONOPULOS: Muy bien. Con Diego no tengo muchas escenas, pero en las que son grupales es increíble, carismático, lo veo cómodo en su regreso a la actuación, es placentero y me encanta la pareja que hace con Eleonora.
AMIGORENA: Impecable, es una grata sorpresa haberlo conocido, aprendés de él en silencio, que es lo más importante, no cuando te lo dicen. Es un artista, figura internacional, muy profesional, rol de padre en la ficción y en la vida real. Un tipo que no para de irradiar música.
—Comparten el amor a la música. ¿No hubo zapada en los camarines?
AMIGORENA: No, todavía no. Hay un respeto. Ojo: yo canto y él es cantante (se ríe).
—¿Es líder o perfil bajo?
ANTONOPULOS: Es uno más, está disponible, es un elenco donde todos estamos conformes con el personaje. Es un proyecto generoso. A veces los proyectos no lo permiten. Uno disfruta más cuando ve que todos los compañeros pueden disfrutarse y mostrarse. En la presentación del martes vimos en el tráiler que todos estaban felices. Y eso hace que nadie mire el laburo del otro.
—¿Te pasó, como en la tira, de reencontrarte con algún amor del pasado?
AMIGORENA: Sí, me pasó después de diez años sin vernos. En general he vuelto por una cuestión de piel, por lo que fueron encuentros fogosos sabiendo que no podíamos estar juntos en pareja, sólo disfrutábamos del momento íntimo, diferente a mi personaje, que nunca deja de querer al personaje de Eleonora.
—¿Vas a tener escenas jugadas como en “El elegido”?
ANTONOPULOS: No. Es distinto el personaje, acá es una actriz, vulnerable, insegura y frágil, y además el género es una comedia. El anterior estaba vinculado por la oscuridad de un pecado capital y el extra de su sexualidad con otra mujer. Leer los libros es un placer, no cambiás ni una coma y los personajes son todos bien distintos.
—¿Compartirían pantalla con Tinelli?
AMIGORENA: ¡Cómo no! No tendría problema, pero es una decisión del canal que no me incumbe. El canal va a hacer lo mejor para su producto. Si Marcelo está, habrá que compartir.
“Sebastián me llamo siempre”
*Leandro Ceruti
“Era la tercera vez que Sebastián me convocaba para un proyecto”, dice Diego Torres sin querer dar detalles acerca de las dos ofertas anteriores. “Decirle que no nunca fue un acto menor, porque a mí sus proyectos me resultaban atractivos, entonces era como decirle que no a una chica que te gusta... Pero ahora todo se acomodó para poder hacerlo”. El reciente padre de Nina asegura que disfruta de su “duelo actoral” con Mike Amigorena: “Recién nos abrazamos y en esas confesiones que hacemos los hombres cuando mariconeamos, le dije: ‘Yo sabía que nos íbamos a cruzar en el camino’. En la serie nos odiamos, porque él quiere reconquistar a su viejo amor, que es mi mujer”.
Torres contó que le avisó tarde a su amigo Adrián Suar de sus ganas de regresar a la televisión; de hecho, cuando las conversaciones con Ortega ya estaban muy avanzadas, lo que tomó por sorpresa al factótum de Pol-ka. “El año pasado, a fin de año, me fui a comer un asado a su casa y cuando me estaba yendo le digo: ‘Boludo, sabés que estoy hablando con Sebastián, viste...’. Y el Chueco me miró y me dijo: ‘¿Vos tenías ganas de volver? ¿Y cómo no me avisaste?’. Y ahí mismo me empezó a hablar de 14 proyectos. Así que tenemos ganas de trabajar juntos y vamos a volver a hacerlo en algún momento”, confirmó Diego, quien mantiene una estrecha amistad con Suar y a quien mira también por TV. “Nos mandamos mensajitos todo el tiempo. Ayer, por ejemplo, llegué de grabar y me puse a ver el programa suyo porque me gusta, y para ver a mi sobrina (Angela)”.
Diego no escatimó críticas a los funcionarios políticos al opinar sobre la trágica situación de los inundados en La Plata: “Deja expuesta una realidad en la que los políticos y los gobernantes tienen que hacer obras. No inaugurar siempre cosas que se ven, sino hacer un trabajo de ingeniería como los profesionales están demandando, dedicar el presupuesto que se tiene que dedicar y empezar a trabajar en conjunto, por más que piensen diferente y sean de diferentes partidos. Me parece que hay que empezar a trabajar y hacer las cosas como se debe, ¿no?”.
Maternidad y coquetería
Antonópulos sostiene a su pequeño hijo, Camilo, que tuvo con su pareja, Coraje Abalos. Antes de ingresar al escenario de la Sala Martín Coronado del San Martín para interpretar a Lady Macbeth (termina mañana), dice que “ser madre es una tarea extraordinaria que vas aprendiendo día a día”, y cuenta que “a veces lo llevo al set y otras se queda con el padre los días que él no graba, si no con la abuela, tías o primas”. La ganadora de un Martín Fierro por su personaje gay en El elegido competirá con su marido, que pertenece al elenco de Solamente vos. “No lo hablamos ni nos parece curioso. Nos resulta importante estar trabajando”, responde.
—¿Lo viste en Solamente vos?
—Sí, me encantaron sus escenas, muy gracioso, y la tira me parece divertida, todos los actores están divinos y me gustó su historia de un tipo grande que sale con una pendeja divina y que la deja embarazada.
El ex de Carla Peterson revela que casi no mira TV, “sólo Bendita, el Gourmet o Discovery”, aunque reconoce que vio la ficción de Suar y Oreiro. “Tiene buen ritmo, color, y el gran regreso de Oreiro. Y cuando dicen que competimos, no creo que sea la palabra justa, sino que salimos a jugar. Es como ver dos películas diferentes en el cine. Entiendo que para la industria no”.
—¿La belleza es importante en la industria?
—No tanto como la estrategia, que te hace perdurar. Es un sentido común, ¿a quién preferís: a uno lindo o feo? Lo importante es lo que tenés para decir, la belleza no es una condición fundamental.
—¿Sos coqueto?
—Me encanta la ropa. Tengo un sentido de la estética bastante desarrollado.
—Sí, me encantaron sus escenas, muy gracioso, y la tira me parece divertida, todos los actores están divinos y me gustó su historia de un tipo grande que sale con una pendeja divina y que la deja embarazada.
El ex de Carla Peterson revela que casi no mira TV, “sólo Bendita, el Gourmet o Discovery”, aunque reconoce que vio la ficción de Suar y Oreiro. “Tiene buen ritmo, color, y el gran regreso de Oreiro. Y cuando dicen que competimos, no creo que sea la palabra justa, sino que salimos a jugar. Es como ver dos películas diferentes en el cine. Entiendo que para la industria no”.
—¿La belleza es importante en la industria?
—No tanto como la estrategia, que te hace perdurar. Es un sentido común, ¿a quién preferís: a uno lindo o feo? Lo importante es lo que tenés para decir, la belleza no es una condición fundamental.
—¿Sos coqueto?
—Me encanta la ropa. Tengo un sentido de la estética bastante desarrollado.
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