Aunque podría contar con actores dobles en las secuencias más arriesgadas de sus películas, Jason Statham prefiere afrontar él mismo las escenas más peligrosas.
El actor británico se encarga personalmente de esas tareas porque le encanta explotar al máximo las capacidades de su atlético cuerpo y, sobre todo, porque no concibe que terceras personas tengan que hacer un trabajo que solo le corresponde a él.
''Siempre me están regañando por rechazar la presencia de especialistas en el rodaje de mis películas. Entiendo que a los productores y directores les dé miedo que su actor principal acabe en el hospital por un accidente y arruine por completo el calendario de la cinta, pero creo que es parte de mi trabajo correr riesgos", afirmó.
Para Jason Statham, dicha decisión responde a su prestigio como actor de filmes de acción. "Un minero tiene que ensuciarse las manos para hacer su labor, así que yo tengo que hacerme daño para ser un buen intérprete de películas de acción. La verdad es que me divierte y me hace vivir aventuras trepidantes, no lo voy a negar'', aseguró el actor a la revista Zoo.
Statham no solo se implica al máximo en los aspectos físicamente de sus filmes, sino también en la labor de documentarse a fondo para lograr mimetizarse por completo con el carácter de sus personajes. Esa obsesión por la perfección llevó al artista a entrevistarse con varios veteranos de guerra para preparar su última película, 'Redemption'.
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