La barba de uno, varios o muchos días, puede tener más o menos detractores entre la población, y muy especialmente en el sector femenino. Por eso, cuando un sex symbol internacional se atreve a pasear sobre la alfombra roja luciendo una exótica y frondosa barba, es inevitable pensar si se trata de una nueva tendencia en lo que respecta al vello facial, o si, por el contrario, es el resultado de un nuevo papel en el cine o en el teatro.
En el caso de Jude Law, el look "barbudo" tiene que ver con la obra que protagoniza en Londres, Anne Christie, nada más ni nada menos que el texto con el que Eugene O'Neill ganó el Pulitzer. Con semejante responsabilidad todos los ojos estaban puestos en esta versión del West End, y por fortuna para el actor que despierta suspiros a diestra y siniestra, cosechó excelentes críticas.
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