En los últimos meses, la vida de la actriz Demi Moore (49) dejó ser rosada para llenarse de grises. La infidelidad de su expareja Ashton Kutcher (33), laposterior ruptura y sus distintas crisis personales le han jugado una mala pasada a la estrella, quien fuese ingresada de urgencia la semana pasada por un supuesto abuso en el consumo de sustancias.
Ahora bien, un amigo de la artista le ha asegurado a la cadena E!, que Demi no terminó en el hospital por culpa de todo lo que pasó con Ashton, sino que en realidad ha sido su ambición en búsqueda de la perfección lo que la ha llevado a actuar aceleradamente.
"Todo esto no ha pasado por Ashton", asegura la fuente. "Esto es más por el peaje que tiene que pagar toda mujer ambiciosa en este país", agregó, haciendo referencia a la imagen que hay que mantener en ese ambiente de la fama para permanecer en los primeros planos y ser vista con buenos ojos por el resto de la sociedad.
"Constantemente tiene que probar que no es sólo una cara bonita sino también una actriz con talento. Constantemente teniendo que probar que es buena madre y no una celebrity que va a las fiestas en lugar de estar cuidando de su familia", explicó el amigo de Moore.
A pesar de que Kutcher estaba muy lejos divirtiéndose al momento de la internación de su expareja, cuando se enteró de lo sucedido, se mostró muy interesado en el estado de salud de la actriz. Demi perdió el conocimiento tras haber fumado "una especie de incienso", según lo que comentó la mujer que llamó a los servicios de emergencia.
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