Elena Roger "Evita es un buen viaje"

Elena Roger. La argentina cuenta sus emociones de ser una estrella en Broadway, y lo que siente con el musical que considera "un poco antiperonista".

                 

El encuentro es en Kodama, un local de sushi a una cuadra y media del teatro, donde Elena Roger pide varias noches el delivery.

Aclara que quiere un lugar tranquilo, sin ruido "porque no puedo hablar a los gritos". Debe cuidar la voz.

Ya instalada en Broadway, ¿qué es lo mejor y lo no tan bueno de ser una estrella? "No hay cosas negativas, por lo menos por ahora ­dice-, es toda una nueva experiencia, desde que salís del teatro y hay vallas para que la gente no te toque. El otro día había unas señoras con una bandera de Argentina..."

Eso en el West End, en Londres, no te pasaba...

No, para nada. No, acá pasa mucho porque la gente se vuelve un poco loca. Además tengo chofer, me pusieron uno y está buenísimo, me lleva y me trae al teatro.

¿Hay alguna diferencia notable en la puesta de aquí con la que participaste en 2006 en Londres?

La obra es la misma, nada más hay cosas que el director modificó de la obertura. Es tal cual. Distintos son los actores, alguna modificación en la coreografía, en la escenografía. Mínimo. Como que las cosas que no terminaban de cerrar allá, acá le dieron una vuelta más.

Y está "You Must Love Me", que cantaba Madonna en el filme, que ya estaba en el reestreno de Londres. ¿Cuál es para vos el momento más emotivo sobre el escenario?

Bueno, You Must Love Me es un momento muy emotivo.

Y cuando cantás "No llores por mí Argentina", cuando pronunciás la palabra Argentina... ¿qué sentís?

No llores... es como... Me emocionaba mucho cuando estaba en Londres cantarla, pero ahora no tanto.

Te acostumbraste.

Un poco, sí. Me emocionan otros momentos de la obra. Como el final. Y el principio, también. Sí, es un buen viaje la obra.

Leí en "The New York Times" que decías que el musical es antiperonista. ¿Cómo lo vivís?

Mirá, yo leí y sigo leyendo sobre Eva. Lo que me gustaría encontrar es ese libro que es super recontra antiperonista... (N. de la R.: Evita: la mujer con el látigo, de Mary Main).

Ayer estaba viendo el documental de Leonardo Favio Perón, Sinfonía de un sentimiento, y hay mucha data de lo que ellos hicieron, desde cómo estaba el país, cómo la clase obrera logró tener más acceso a cosas que antes no tenía. Una cosa es lo que veo que es el peronismo y otra cosa es Evita. Para mí ella realmente fue una mujer que quería ayudar al pobre. Le había gustado el poder, ¿a quién no le gusta? La obra la critica, o se ríe de la cantidad de hombres que tuvo. Yo me río, porque ¿y los hombres que se acostaban con ella, qué eran? ¿Santos? Es esa cosa del machismo... Los hombres ¿no la usaban? ¿Ella realmente los usaba para subir, o era que estaba cagada de hambre y necesitaba un padre o alguien que le diera de comer? No me sirve a mí esa crítica hacia Evita, que encima llegó a ser la mujer del presidente. Porque me serviría "pucha, perseguían a los que no eran peronistas, habrán torturado a algunos cuántos, matado a otros tantos", ahí sí te puedo decir que eso está mal. Para vos, en la primera votación que gana Perón, ¿hubo fraude? En la primera entendemos que no, pero en la obra se muestra que sí. Es un musical...

Cuando digo que es un poco antiperonista es que critica un montón de cosas, a varios peronistas no les gustaría. Pero es un musical.

En enero Elena comenzó con los ensayos, y ahí tuvo tiempo de ver musicales, cosa que ahora por las funciones le resulta imposible. "Vi The Book of Mormon, me cagué de la risa, fui a ver Mary Poppins, que ya la había visto, pero fui con Mariano (Torre, su novio) a ver algunas que él no había visto. Spiderman (pone cara de asco), El Rey León...

Soy amplia. En realidad, me gusta el teatro", declara. Y ahora que tendrá libre las noches de los miércoles ("me pidieron que haga alguna matinée, porque hay gente que sino no puede verme", o sea que actúa todas las noches menos la del miércoles, cuando hace la función de la tarde), aprovechará a ver obras de texto.

Elena tiene contrato hasta marzo de 2013, con posibilidades de renovar. Y si no, ¿qué hará? "Descansar, me parece, después de un año... Tenía una propuesta de cine, me tomaría unas vacaciones de la obra, pero no da...". Cuenta que, como siempre, "vuelan muchos personajes en mi cabeza que quisiera hacer, pero me da un poco de pudor. Me digo, ah, mirá, este personaje puede ser interesante... Y después llegan. Se eligen solos".

¿Te pasó con Evita?

No. Tuve una propuesta de (Alberto) Favero, que quería que hiciera Evita en concierto, cantar las canciones de la Eva de Nacha, pero eso no se pudo hacer. Y bueno, nada. Después llego Evita.

¿Es un momento muy feliz este presente?

Sí, pero no le quiero dar más importancia que la que tiene. Me siento muy afortunada de estar protagonizando este momento, pero no siento que sea lo único que me pasa en la vida. Me gusta que allá (en la Argentina) se sepa, que la gente hable de mí me pone contenta.

(Clarin)