Breaking Bad fue reconocida en los premios Emmy como la mejor serie dramática estadounidense por segundo año consecutivo, y también se llevó los tres principales premios a la actuación.
La serie sobre el profesor Walter White, que comienza a fabricar y vender metanfetaminas para cuidar de su familia después de ser diagnosticado de un cáncer terminal, concluyó el año pasado después de cinco temporadas.
"¡Santo cielo!" exclamó el creador de Breaking Bad, Vince Gilligan, al aceptar el Emmy, el mayor honor de la televisión estadounidense.
"Este es de hecho un momento maravilloso para estar trabajando en la televisión (..).todos somos afortunados de estar trabajando ahora", agregó Gilligan, cuyo programa cosechó cinco Emmys para la cadena de cable AMC.
Breaking Bad se impuso a True Detective, el thriller de línea política de Netflix House of Cards, la fantasía medieval de HBO Juego de tronos, la serie británica de PBS "Downton Abbey" y el retrato de AMC del mundo de la publicidad "Mad Men".
La serie de ABC Modern Family sobre familias no convencionales conquistó el galardón a mejor serie cómica por quinto año consecutivo, empatando con la serie de NBC Frasier por la mayor cantidad de victorias para una comedia.
"Modern Family ha sido un sueño hermoso sueño durante los últimos cinco años y les agradecemos no habernos despertado", dijo el cocreador de la serie Steven Levitan.
Juliana Margulies ganó como mejor actriz en una serie dramática por suinterpretación de la abogada Alicia Florrick en The Good Wife de CBS.
Louis-Dreyfus ganó su tercer Emmy consecutivo por su papel como la ambiciosa y malhablada vicepresidenta de Estados Unidos, Selina Meyer, en la sátira política de HBO Veep.
Jim Parsons obtuvo su cuarto Emmy como actor principal de comedia por su interpretación del pedante científico Sheldon Cooper en la comedia de CBS The Big Bang Theory.
La miniserie Fargo dio a FX Networks su primer Emmy por un programa, pero los actores de la aclamada miniserie no lograron llevarse estatuillas a pesar de haber estado entre los favoritos, sobre todo Billy Bob Thornton.
El presentador del programa, el humorista Seth Meyers, abrió la ceremonia bromeando sobre la amenaza que representa el servicio por internet Netflix para las cadenas de cable y la nominación de la serie sobre una prisión de mujeres Orange Is the New Black como comedia en lugar de drama.
"Tuvimos comedias que te hacen reír y comedias que te hacen llorar. Porque son dramas nominados como comedias", dijo Meyers en su monólogo inicial en el Teatro Nokia en el centro de Los Ángeles.
El programa de celebración tuvo una nota sombría cuando el actor Billy Crystal rindió un homenaje a su amigo, el actor y humorista Robin Williams, que murió en un aparente suicidio hace dos semanas.
En los premios de comedia, Louis CK ganó su segundo premio como mejor guionista por su programa de FX Louie, y The Colbert Report de Comedy Central ganó por segundo año consecutivo el Emmy a mejor programa de variedades.
La miniserie británica Sherlock: His Last Vow ganó tres premios Emmy para PBS, la cadena pública que lo emite en Estados Unidos.
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