El nido de amor que Kristen Stewart y Robert Pattinson compartían en Malibú está en venta.
Pero la actriz ha decidido no mudarse de la zona y se ha comprado una casa allí mismo para compartirla con su madre.
Pero la actriz ha decidido no mudarse de la zona y se ha comprado una casa allí mismo para compartirla con su madre.
Llevaban cuatro años como pareja. Eran felices. Y todo les iba sobre ruedas. Pero el desliz de Kristen Stewart con el director de la última película que ha protagonizado, Blancanieves y la leyenda del cazador, ha echado todo eso por tierra.
Obligada por unas fotos publicadas en la revista US Weekly, Kristen Stewart tuvo que confesar que le había sido infiel a Robert Pattinson con el director de la película, Rupert Sanders.
Y, a partir de ahí, surgió el terromoto. Declaraciones de los implicados y de los personajes secundarios, de amigos y de no tan amigos. Salvo de Robert Pattinson que se enteró de los cuernos de su chica por la prensa y que desde que se destapó el escándalo no ha dicho ni una palabra fuera de su sitio.
Todo este embrollo se saldó con el abandono por parte de la pareja de la casa que compartía en Malibú.
Pero a Kristen Stewart la zona le gusta tanto que ha decidido comprarse en ese área de playas californianas una nueva casa para compartirla... ¡con su madre!
Según ha informado Radar Online, Kristen y su madre Jules Monn Stewart se han comprado una mansión valorada en 4,8 millones de dólares que contaría con cinco habitaciones y cuatro baños repartidos a lo largo de tres pisos. En el exterior, madre e hija también contarían con amplios jardines en donde poder descansar y tomar el sol.
Ambas están recién separadas. La actriz, de Robert Pattinson, con todo el revuelo mediático que ha provocado; y la madre, del que fue su marido durante 27 años y con el que tuvo a Kristen.
Y como la vida sigue, Kristen está retomando su agenda. El fin se semana se dejó ver en elToronto International Film Festival (TIFF) para presentar, con Garret Hendlum y Kirsten Dunst, su última película On the road.
Y, pese a sus esfuerzos por sonreír, la actriz lo consiguió a duras penas, como se ve en estas fotografías. En ellas, Kristen aparece mucho más delgada de lo habitual y con unas ojeras como sacos de dormir que ni el mejor corrector pudo disimular.
La dieta de cigarrillos y bebidas energéticas que, según indica la prensa estadounidense, está siguiendo la actriz, tampoco ayuda mucho, claro...
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