La actriz debuta como protagonista en el ciclo Treinta días juntos. Se ríe de los rumores de crisis con su novio, Nicolás Cabré, y ni piensa en innovaciones sexuales.
Primero aparece su novio, Nicolás Cabré. Viste elegante, íntegramente de negro y luce un saco azul. Saluda amable mientras fuma un cigarrillo. María Eugenia Suárez arriba unos minutos después para charlar sobre su ascendente carrera a los 20 años, su relación con el galán, y el nuevo protagónico en Treinta días juntos, unitario que se estrenará el 19 de septiembre por Cosmopolitan TV, a las 22. Impacta con un minishort negro, zapatos al tono con brillantes y plataforma de diez centímetros, camisa blanca y un sombrero. Antes de comenzar la entrevista, sonríe, mira a Cabré, le da un beso apasionado y le dice en voz baja: “Te amo”.
—¿Podés aguantar un mes sin tu pareja como en tu nueva ficción?
—No. Si Nico se tuviera que ir afuera lo acompañaría. Cuando filmó ¡Atraco! no éramos novios y gracias al cielo no lo sufrí. No aguantaría. Soy repasional, tanto en mi trabajo como en mi pareja y mi familia. Necesito convivir, estar día a día.
El unitario tendrá 13 capítulos que se terminaron de grabar la semana pasada. La China dedica palabras de agradecimiento a sus compañeros, productores y equipo técnico en su primera experiencia como única protagonista. “No sentí ni siento presión. Soy bastante inconsciente de lo que me pasa. Sólo me doy cuenta porque grabo más escenas. Ojalá el día de mañana lo pueda hacer en televisión abierta”, contesta la ex Teen Angels. Y dice que su tranquilidad y disfrute diario se los debe a la educación que le dieron sus padres: “De chica me dieron mucha libertad para que hiciera lo que quisiera –afirma–. Y creo que eso fue fundamental para mi personalidad”.
—¿Ellos tienen algún pasado dentro del arte?
—No. Mi mamá es ama de casa, mi papá tenía una empresa de seguros y mi hermano es publicista. Mi papá escuchaba mucho a Los Beatles y quizá heredé desde esa parte.
—No. Si Nico se tuviera que ir afuera lo acompañaría. Cuando filmó ¡Atraco! no éramos novios y gracias al cielo no lo sufrí. No aguantaría. Soy repasional, tanto en mi trabajo como en mi pareja y mi familia. Necesito convivir, estar día a día.
El unitario tendrá 13 capítulos que se terminaron de grabar la semana pasada. La China dedica palabras de agradecimiento a sus compañeros, productores y equipo técnico en su primera experiencia como única protagonista. “No sentí ni siento presión. Soy bastante inconsciente de lo que me pasa. Sólo me doy cuenta porque grabo más escenas. Ojalá el día de mañana lo pueda hacer en televisión abierta”, contesta la ex Teen Angels. Y dice que su tranquilidad y disfrute diario se los debe a la educación que le dieron sus padres: “De chica me dieron mucha libertad para que hiciera lo que quisiera –afirma–. Y creo que eso fue fundamental para mi personalidad”.
—¿Ellos tienen algún pasado dentro del arte?
—No. Mi mamá es ama de casa, mi papá tenía una empresa de seguros y mi hermano es publicista. Mi papá escuchaba mucho a Los Beatles y quizá heredé desde esa parte.
Suárez será uno de los cinco hijos de Adrián Suar en la ficción que Pol-ka prepara para 2013. “Cuando Adrián me contó la historia y que iba a estar Natalia (Oreiro) no lo dudé”, dice con una sonrisa inmensa, y cuenta que no tiene contrato de exclusividad con el productor. Adelanta que las grabaciones estarían pensadas para diciembre, cuando volverá a actuar con Lali Espósito, su ex compañera en los Teen Angels. Sincera, asegura que su carrera no se recapitalizó por estar con Cabré: “Sigue todo igual. No me llueven propuestas”, y sobre los rumores de crisis sentimentales dispara: “Lo veo y digo: ‘Ah, me separaron otra vez’. Ya me río. Por suerte no nos afecta. Siempre hay algunos que tienen mala leche... La mejor manera es tomármelo bien tranquila”.
—¿Viste “¡Atraco!” y “Dos más dos”?
—Sí, ¡Atraco! la vi tres veces. La primera con Nico antes del estreno, que lloré muchísimo, no me quería separar de él, me mató que se muriera en la historia... Fui a la avant première, donde volví a llorar, y después repetí y otra vez lloré. Me parece que es una gran película, y más allá de que sea mi novio y lo admire como actor, no puedo creer lo que actúa y transmite. Y Dos más dos tengo que ir a verla. Sé que la comedia es una historia que trata sobre swingers y esas cosas.
—La actriz norteamericana Jane Fonda recorría prostíbulos de su país para compartir la cama con su esposo, el director francés Roger Vadim, y una prostituta. En su biografía, Fonda cuenta que lo hacía por amor...
—No. Yo no lo considero amor. Soy Susanita, me gusta estar con una sola persona. No soy cerrada de mente, cada uno que haga lo que quiera, pero a mí esas historias no me van. Ni en pedo lo hago. Ni de mis amigas ni nadie de mi entorno escuché una historia así.
—Sí, ¡Atraco! la vi tres veces. La primera con Nico antes del estreno, que lloré muchísimo, no me quería separar de él, me mató que se muriera en la historia... Fui a la avant première, donde volví a llorar, y después repetí y otra vez lloré. Me parece que es una gran película, y más allá de que sea mi novio y lo admire como actor, no puedo creer lo que actúa y transmite. Y Dos más dos tengo que ir a verla. Sé que la comedia es una historia que trata sobre swingers y esas cosas.
—La actriz norteamericana Jane Fonda recorría prostíbulos de su país para compartir la cama con su esposo, el director francés Roger Vadim, y una prostituta. En su biografía, Fonda cuenta que lo hacía por amor...
—No. Yo no lo considero amor. Soy Susanita, me gusta estar con una sola persona. No soy cerrada de mente, cada uno que haga lo que quiera, pero a mí esas historias no me van. Ni en pedo lo hago. Ni de mis amigas ni nadie de mi entorno escuché una historia así.
Afectos del pasado
María Eugenia Suárez mide 1,68, tiene ojos verdes, pelo rubio, y sus medidas son 90-60-88. Nació en Capital Federal y se crió en el seno de una familia católica. “Creo en Dios, en las energías, los ángeles, y rezo todas las noches.” Hasta diciembre, dice que no viajará con su novio: “Estoy tranquila, disfrutando del noviazgo, familia, amigas, y mi perro Paul”. De su relación con su ex cuñada Juana Viale afirma que no volvieron a hablar. “No tengo contacto porque no deja de ser la hermana de mi ex novio (Nacho Viale). En su momento tuvimos una muy buena relación.”
Suárez dice que en su vida se maneja a pura intuición. “Quizás un día me despierto y quiero hacerme otro tatuaje. Y me lo hago. Así me pasó con los Teen Angels. Sentí que había terminado una etapa, tenía ganas de crecer. Nunca me voy a olvidar porque fue increíble y algún día quisiera volver a un escenario”, confiesa la rubia que abandonó el grupo hace dos años.
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