El actor estrena Mi amor, mi amor el próximo miércoles por Telefe, canal que según él se adecuará a la ley. Califica a su mujer, Nancy Dupláa, como una actriz talentosa.
Creemos que tenemos un material realmente sólido, digno, atractivo, divertido y después la gente dirá”. Estas fueron las primeras palabras de Pablo Echarri al presentar las escenas armadas para que la prensa viera Mi amor, mi amor, el segundo ciclo de su productora El Arbol, proyecto que lo tiene junto a Martín Seefeld. Más allá de la sencillez que tiene el actor y hoy empresario hay que subrayar su coraje a la hora de responder. No todos los artistas lo ostentan. No se lo ve incómodo, por el contrario, su voz no se modifica y sus palabras salen seguras a la hora de dar opiniones que exceden el mundo artístico.
Echarri acompañó a todo su elenco, encabezado por Juan Gil Navarro, Brenda Gandini, Jazmín Stuart y donde se observan importantes trayectorias teatrales entre los numerosos intérpretes. El programa saldrá al aire el próximo miércoles 28 por Telefé, a las 22.30.
—En “Mi amor, mi amor”, hay muchos nombres del teatro independiente. ¿Fue una decisión tuya como productor?
—Sí, en realidad de los dos, tanto Martín (Seefeld) como yo convocamos a los actores que imaginábamos para estos papeles. Martín lo admira a Pasta Dioguardi y en mi caso lo llamé a Osqui Guzmán. Cuando se escribieron los guiones, el papel de Sambito, un policía muy tierno, para mí tenía sólo la cara de Osqui y está construyendo un personaje inolvidable. Creo que se va destacar mucho. También nos había pasado con El elegido, cada vez que llamábamos a un intérprete nos decía que sí. Todo el elenco es muy homogéneo.
—¿Es una adaptación?
—Sí, hace diecisiete años se hizo Naranja y media y es la misma historia, en la cual un hombre se enamoraba de dos mujeres, al mismo tiempo. El protagonista defiende los valores, pero se encuentra queriendo a ambas y debe mentir.
—Hay un bombero…y es inevitable asociar con “Sos mi hombre” de El Trece. ¿No pensaron en esta similitud?
—Sí, somos conscientes y lo pensamos, pero no podíamos sacarlo porque hubiese sido quitarle mucho al personaje. El bombero era algo muy atractivo y no quisimos cambiarlo, porque es una parte muy importante de esta ficción. Además las historias no se parecen en nada.
—Iban a ir a la tarde y ahora se emitirá en un horario de mucha competencia. ¿A qué se debió el cambio?
—Generalmente los proyectos se arman con una idea, pero es Tomás Yankelevich (director de programación de Telefé) quien decide en qué horario los ubica. Cuando arrancamos a trabajar buscamos hacer una propuesta con una calidad que no tuviera horario fijo, porque queremos estar siempre a la altura de las circunstancias.
—¿Qué pensás que este año la ficción, “Graduados” con tu mujer a la cabeza (Nancy Dupláa) vence al reality de Marcelo Tinelli?
— Me pone contento por la ficción. Que hoy por hoy estén peleando contra un show tan importante como el de Marcelo nos da la pauta de que las historias están siempre vigentes. Para competirle al show más importante de la televisión argentina sólo lo puede hacer una ficción, no hay otra cosa y es una buena noticia para nosotros, los actores.
—En el 2011 tu productora El Arbol junto a Martín Seefeld presentaron “El Elegido”, pero este año decidieron o tuvieron que asociarse a otras dos empresas (Endemol y Telefe): ¿por qué?
—Básicamente con Endemol, ya que Telefé lo trasmite. Fue por cuestiones logísticas y además Endemol está arraigada en este canal. Esta tira era posible armando un frente en común en todo sentido. Es muy buena la relación y el equipo que conseguimos. Ellos tienen los estudios, el espacio físico y la financiación. Nosotros nos ocupamos de todo lo artístico: la escribimos, la dirigimos y grabamos, pero la parte operativa la pone Endemol.
—Después del 7D: ¿cambiará mucho la televisión?
—Creo que sí, todos se van a tener que buscar efectivizar y adecuarse a la “Ley de Medios” y al artículo 161, que fue el punto de mayor contradicción y pelea. Es importante la adecuación y desde mi lugar creo que se hará efectivo.
—¿Sabes que Telefe modificó su página Web para que no se lo asocie con Telefónica de España?
—¿Crees que porque no está en la página no recibirá cuestionamientos ? Me parece realmente que es un discurso poco inteligente, como si el Gobierno verdaderamente pudiera decidir quién se adecua y quién no. Es una ley que tiene que cumplirse y no es tan fácil ocultar. Es un discurso a propósito para que la gente crea que la adecuación vendrá solamente para entre comillas los “enemigos del Gobierno”. No creo en eso, descartaría esa línea, para mí eso es falso. Telefe se tiene que adecuar, lo hará, no conozco el exceso de canal Trece pero todos tendrán que aceptar la ley.
—¿Cómo van los ensayos con Nancy Duplaa en reemplazo de Florencia Peña en “El hijo de p*@ del sombrero”?
—Va muy bien y Nancy le está dando un color muy atractivo, diferente al trabajo de Flor (Peña). El personaje es uno solo, por lo cual la estructura es la misma, lo que cambian son las actrices y ambas son muy distintas como intérpretes.
—Pero Peña tiene mucha más experiencia teatral que Dupláa…
—Sí, pero la experiencia teatral no creo que juegue mucho con la gente talentosa. Nancy tuvo una pequeña experiencia teatral, pero tiene un talento enorme. A mí me pasó cuando hice Pillowmen me sentí como pez en el agua sobre el escenario. Creo que le va a sacar mucho jugo. Grabamos juntos un cuento de Fontanarrosa para tele, pero tenía muchas ganas de compartir escenario y temporada de verano con la familia. Es una alegría doble que se me dé en Mar del Plata, con ella al lado y en el teatro.
—Sí, en realidad de los dos, tanto Martín (Seefeld) como yo convocamos a los actores que imaginábamos para estos papeles. Martín lo admira a Pasta Dioguardi y en mi caso lo llamé a Osqui Guzmán. Cuando se escribieron los guiones, el papel de Sambito, un policía muy tierno, para mí tenía sólo la cara de Osqui y está construyendo un personaje inolvidable. Creo que se va destacar mucho. También nos había pasado con El elegido, cada vez que llamábamos a un intérprete nos decía que sí. Todo el elenco es muy homogéneo.
—¿Es una adaptación?
—Sí, hace diecisiete años se hizo Naranja y media y es la misma historia, en la cual un hombre se enamoraba de dos mujeres, al mismo tiempo. El protagonista defiende los valores, pero se encuentra queriendo a ambas y debe mentir.
—Hay un bombero…y es inevitable asociar con “Sos mi hombre” de El Trece. ¿No pensaron en esta similitud?
—Sí, somos conscientes y lo pensamos, pero no podíamos sacarlo porque hubiese sido quitarle mucho al personaje. El bombero era algo muy atractivo y no quisimos cambiarlo, porque es una parte muy importante de esta ficción. Además las historias no se parecen en nada.
—Iban a ir a la tarde y ahora se emitirá en un horario de mucha competencia. ¿A qué se debió el cambio?
—Generalmente los proyectos se arman con una idea, pero es Tomás Yankelevich (director de programación de Telefé) quien decide en qué horario los ubica. Cuando arrancamos a trabajar buscamos hacer una propuesta con una calidad que no tuviera horario fijo, porque queremos estar siempre a la altura de las circunstancias.
—¿Qué pensás que este año la ficción, “Graduados” con tu mujer a la cabeza (Nancy Dupláa) vence al reality de Marcelo Tinelli?
— Me pone contento por la ficción. Que hoy por hoy estén peleando contra un show tan importante como el de Marcelo nos da la pauta de que las historias están siempre vigentes. Para competirle al show más importante de la televisión argentina sólo lo puede hacer una ficción, no hay otra cosa y es una buena noticia para nosotros, los actores.
—En el 2011 tu productora El Arbol junto a Martín Seefeld presentaron “El Elegido”, pero este año decidieron o tuvieron que asociarse a otras dos empresas (Endemol y Telefe): ¿por qué?
—Básicamente con Endemol, ya que Telefé lo trasmite. Fue por cuestiones logísticas y además Endemol está arraigada en este canal. Esta tira era posible armando un frente en común en todo sentido. Es muy buena la relación y el equipo que conseguimos. Ellos tienen los estudios, el espacio físico y la financiación. Nosotros nos ocupamos de todo lo artístico: la escribimos, la dirigimos y grabamos, pero la parte operativa la pone Endemol.
—Después del 7D: ¿cambiará mucho la televisión?
—Creo que sí, todos se van a tener que buscar efectivizar y adecuarse a la “Ley de Medios” y al artículo 161, que fue el punto de mayor contradicción y pelea. Es importante la adecuación y desde mi lugar creo que se hará efectivo.
—¿Sabes que Telefe modificó su página Web para que no se lo asocie con Telefónica de España?
—¿Crees que porque no está en la página no recibirá cuestionamientos ? Me parece realmente que es un discurso poco inteligente, como si el Gobierno verdaderamente pudiera decidir quién se adecua y quién no. Es una ley que tiene que cumplirse y no es tan fácil ocultar. Es un discurso a propósito para que la gente crea que la adecuación vendrá solamente para entre comillas los “enemigos del Gobierno”. No creo en eso, descartaría esa línea, para mí eso es falso. Telefe se tiene que adecuar, lo hará, no conozco el exceso de canal Trece pero todos tendrán que aceptar la ley.
—¿Cómo van los ensayos con Nancy Duplaa en reemplazo de Florencia Peña en “El hijo de p*@ del sombrero”?
—Va muy bien y Nancy le está dando un color muy atractivo, diferente al trabajo de Flor (Peña). El personaje es uno solo, por lo cual la estructura es la misma, lo que cambian son las actrices y ambas son muy distintas como intérpretes.
—Pero Peña tiene mucha más experiencia teatral que Dupláa…
—Sí, pero la experiencia teatral no creo que juegue mucho con la gente talentosa. Nancy tuvo una pequeña experiencia teatral, pero tiene un talento enorme. A mí me pasó cuando hice Pillowmen me sentí como pez en el agua sobre el escenario. Creo que le va a sacar mucho jugo. Grabamos juntos un cuento de Fontanarrosa para tele, pero tenía muchas ganas de compartir escenario y temporada de verano con la familia. Es una alegría doble que se me dé en Mar del Plata, con ella al lado y en el teatro.
Las otras militancias
—No es tan conocida tu militancia gremial. En la actualidad como miembro de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes están armando viajes de placer para actores mayores...
—Mi cargo es de pro tesorero, el tesorero es Martín (Seefeld) pero mi puesto ahí es más político que ejecutivo. Nos unimos mucho a la Asociación Argentina de Actores y decidimos poder darle unos días de vacaciones. Tratamos que nuestros adultos se puedan entretener y también estamos gestando junto con el Ministerio de Desarrollo que se den obras de teatro en todos los centros del país.
—Ricardo Bartis dijo que eras un actor muy interesante y que nunca te habías olvidado del barrio.
—Con Bartís tuve una experiencia buenísima que fue Plata quemada, ya que filmamos juntos como actores esa película. Ahí conocí a un gran compañero, que con todo su talento y trayectoria se ubicó en el equipo de trabajo con una humildad enorme. Me halaga que diga eso de mí, conocí a un tipo humilde, generoso y sencillo de un gran talento. Bartís también es un hombre de mucha calle y me halaga. A esta altura me emociono mucho más con la gente generosa, me quedo más con un buen compañero que con un buen actor. Cada vez me pasa más seguido, por eso elijo trabajar con la buena gente, más allá de los resultados artísticos.
—A pesar de algunas críticas y lo fuerte de la propuesta que es “El hijo de p*@ del sombrero” la gente te apoyó: ¿qué sentís?
—Agradecimiento. Con respecto al valor del espectáculo creo que la gente lo apoya más allá de su elenco, no creo que compre una cáscara vacía. Lo cual es bueno.
—Mi cargo es de pro tesorero, el tesorero es Martín (Seefeld) pero mi puesto ahí es más político que ejecutivo. Nos unimos mucho a la Asociación Argentina de Actores y decidimos poder darle unos días de vacaciones. Tratamos que nuestros adultos se puedan entretener y también estamos gestando junto con el Ministerio de Desarrollo que se den obras de teatro en todos los centros del país.
—Ricardo Bartis dijo que eras un actor muy interesante y que nunca te habías olvidado del barrio.
—Con Bartís tuve una experiencia buenísima que fue Plata quemada, ya que filmamos juntos como actores esa película. Ahí conocí a un gran compañero, que con todo su talento y trayectoria se ubicó en el equipo de trabajo con una humildad enorme. Me halaga que diga eso de mí, conocí a un tipo humilde, generoso y sencillo de un gran talento. Bartís también es un hombre de mucha calle y me halaga. A esta altura me emociono mucho más con la gente generosa, me quedo más con un buen compañero que con un buen actor. Cada vez me pasa más seguido, por eso elijo trabajar con la buena gente, más allá de los resultados artísticos.
—A pesar de algunas críticas y lo fuerte de la propuesta que es “El hijo de p*@ del sombrero” la gente te apoyó: ¿qué sentís?
—Agradecimiento. Con respecto al valor del espectáculo creo que la gente lo apoya más allá de su elenco, no creo que compre una cáscara vacía. Lo cual es bueno.
Perfil
0 coment�rios:
Publicar un comentario