De un lado Juana Viale.Del otro lado,Gonzalo Valenzuela.Así en la vida como en la ficción, durante el año pasado fueron dos fuertes villanos de telenovela y competían siendo noticia en las dos ficciones en tira que dieron que hablar.
"Malparida" le dio una vuelta de tuerca actual y creativa a las clásicas historias de heroínas-víctimas y Juana Viale fue aquella victimaria haciendo morir uno tras otro a sus enemigos,entregada a una fiesta de sexo y sangre.
Tanto sexo y sangre como hubo en "Botineras" donde la gente se enamoro de la pareja de Romina Gaetani y Pablo Rago, frustrada por el paso del actor a una historia adonde nunca llegó (Caín y Abel) y de otra pareja, la que conformaron Christian Sancho y Ezequiel Castaño.Amor gay escondido tras rudos futbolistas.
Hoy sus protagonistas vuelven a ser noticia. Por un motivo real, por un lado. Y por el otro, por una polémica verbal desatada a partir de las nominaciones al Martin Fierro , que pueden ser injustas, porque están hechas por seres humanos, pero no corruptas, y es bueno diferenciar el tema.
Lo cierto es que los fans de "Botineras" (como los de Cain y Abel) se sienten frustrados por falta de reconocimiento para sus figuras (desde la protagonista Gaetani,hasta Isabel Macedo,Sancho y Castaño e indignados por las nominaciones para Viale y Gonzalo Heredia.
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