Nueve años después de la muerte del actor, se estrena un documental con vídeos inéditos del intérprete y testimonios de sus seres queridos.
Sus ojos pequeños casi siempre somnolientos; su sonrisa burlona, divertida, auténtica; y su cabello rubio, desordenado. Así era Heath Ledger, el actor australiano que detrás de una imagen de niño bueno y un tanto desaliñado escondía a un increíble intérprete, capaz de encarnar a personajes desde los más románticos y trillados hasta los más psicópatas y viscerales. El actor murió de una sobredosis en enero 2008, apenas tenía 28 años, y, como se suele decir en estos casos, se fue muy joven, aún le quedaban mucho por experimentar, mucho público que conquistar, pero, sobre todo, le faltó cumplir su sueño, ser director.
Sus ojos pequeños casi siempre somnolientos; su sonrisa burlona, divertida, auténtica; y su cabello rubio, desordenado. Así era Heath Ledger, el actor australiano que detrás de una imagen de niño bueno y un tanto desaliñado escondía a un increíble intérprete, capaz de encarnar a personajes desde los más románticos y trillados hasta los más psicópatas y viscerales. El actor murió de una sobredosis en enero 2008, apenas tenía 28 años, y, como se suele decir en estos casos, se fue muy joven, aún le quedaban mucho por experimentar, mucho público que conquistar, pero, sobre todo, le faltó cumplir su sueño, ser director.
Nueve años han pasado desde que fuera hallado muerto en su apartamento de Nueva York debido a una sobredosis accidental de analgésicos y sedantes, y Hollywood sigue recordando aquel 22 de enero como un día trágico, el día que se truncó la carrera de un artista versátil capaz de hacer estupendas fotografías, con un oído privilegiado para la música y con talento innato para la dirección. Estos recuerdos que guardan sus seres más cercanos pronto verán la luz en un documental que narra su vida, aunque se centra más en sus últimos días. I Am Heath Ledger (Yo soy Heath Ledger) se estrenará en el Festival de Cine de Tribeca el 23 de abril.
El tráiler oficial del documental comienza con una imagen del ganador de un premio Oscar a mejor actor de reparto por su papel como Joker en El caballero oscuro, con una cámara en mano y riendo. En él intervienen su hermana Kate Ledger, el director Ang Lee, los actores Naomi Watts, Ben Mendelsohn y Djimon Hounsou, el músico Ben Harper o su amigo Gerry Grennell, entre otros. La película, de 90 minutos, ofrece imágenes inéditas del australiano. Sus seres queridos lo recuerdan como “un hombre muy sensible” que combatió “contra sus demonios internos” en los últimos días de vida. "Creo que fue difícil para él mantenerse al día con quién era", dice el director del documental, Derik Murray, en una entrevista exclusiva con People.
Para su familia, este largometraje es un regalo para Matilda, la hija que Heath Ledger tuvo con Michelle Williams, que tenía solo 2 años cuando él murió. “Le podemos contar cosas de su padre, pero darle la oportunidad de verlo, que conozca la forma en que se movía, sus expresiones, es diferente. Este documental es como si él lo hubiera hecho, como si se hubiera grabado en distintas ocasiones y luego las hubiera unido para ella”, dice la hermana del intérprete.
Antes de su muerte algunos de sus seres queridos lo notaban triste, otros alegre, pero todos coinciden que el protagonista de Brokeback Mountain se sentía incompleto tras su ruptura con la actriz Michelle Williams. La pareja comenzó a salir en 2004 y en 2005 nació Matilda. Tras su separación, el actor sufría por no poder estar más cerca de su hija. “Él era un padre estupendo. Supo desde el minuto uno cómo tratar a su bebé”, recuerda su amigo Matt Amato. “Yo una vez le pregunté cómo hacía para desenvolverse con tanta soltura. Él me respondió: ‘La veo, intento ponerme en sus zapatos, saber qué siente, entender sus necesidades’. Espero que Matilda logre recordar la mirada de su padre, la forma en que la admiraba, la conexión que había entre ambos. Ellos tenían algo maravilloso”, puntualiza Amato, quien también añade que durante mucho tiempo Ledger quiso la fama “y cuando la consiguió, ya no la quería".
En el filme, Djimon Hounsou, coprotagonista con Ledger de Las cuatro plumas (2002), cuenta que se sorprendió al verlo poco antes de su muerte: "Me encontré con él en Nueva York, no lo había visto en un par de años, y me preocupé", apunta haciendo referencia a su estado de ánimo. Mientras, Ben Harper lo recuerda como “el ser humano más vital que podías encontrarte”, dice en el tráiler. “Si algo no lo llevaba hasta las últimas consecuencias, no le interesaba lo más mínimo. Incluso haciendo un papel secundario, conseguía comerse la pantalla”, añade el director Ang Lee. Él dirigió a Ledger en Brokeback Mountain, el primer wéstern moderno en mostrar una relación homosexual entre dos vaqueros.
Tras su paso por Tribeca I Am Heath Ledger, podrá verse en cines seleccionados de Estados Unidos.
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